Comenzaremos la ruta a través del Parque Municipal del Hondo del Río, junto a la presa, y el salto del río. Como veréis, es un entorno encantador con numerosas ocas que nos dan la bienvenida, y de paso, embellecen el paisaje (y las fotos).
Dejando el río atrás, salimos del pueblo para continuar a lo largo de diferentes campos de cultivo, donde pasaremos un rato divertido si están siendo regados.
Una vez pasados estos, a la izquierda, tomamos el camino Batanejo que nos conduce a las zonas más vistosas de la ruta: las hoces del Batanejo, cañón fluvial de roca caliza que se ha formado y que veremos llegando a un mirador sin dificultad. Seguiremos la marcha hasta llegar al puente de las Ovejas.
A través de éste, trazaremos la vuelta circular del trayecto que nos ocupa en sentido contrario, viendo más adelante, las paredes verticales al otro lado del río.
Llegando al pueblo, entre vaguadas y casones cercanos al cauce del río, cruzaremos la carretera si queremos visitar el interés cultural del pueblo. Nos referimos a las ruinas del Palacio de los Gosálvez, de primeros años del s. XX, de estilo versallesco, la ermita de Santiago Apóstol, la fábrica de harinas y la central hidroeléctrica que colocó a Villalgordo en importante industria de la región, de hecho, se convirtió en el segundo pueblo de España en tener luz eléctrica. (Todo el recinto se encuentra vallado, no obstante, resulta interesante acercarse para verlo).
INFORMACIÓN IMPORTANTE DE LA RUTA:
RUTA ORGANIZADA POR:
LUIS FERNANDO, MARI ÁNGELES, PILAR, JOSEFINA Y ANA.
VER EL TIEMPO:
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